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jueves, junio 30, 2005 

La siesta impredecible

Ya está aquí al lado el caos de las rebajas y el principio de las idas y venidas de los compañeros por las vacaciones. Kike, el jefe del almacén, no ha parado hasta dejarlo todo atado y bien atado antes de irse de vacaciones. Ha sido tal cantidad de datos e información que va a ser difícil acordarse de todo (tendría que haberlo apuntado).Por lo demás hemos vuelto a ser dos para comer, de postre mi madre trajo unos pastelitos de Berna para celebrar mis santos de ayer, me ha preguntado por si quiero algún regalo y le he dicho que ya me pagará algo de las rebajas. Después de comer me he tumbado a leer el periódico y me he quedado dormido ¡¡dos horas!!.Tras lavarme la cara con agua fría para despejarme he ido al CGAI a ver Triple Agent de Eric Rohmer. Es una película atípica del director francés, una trama de espías en la época previa a la ocupación nazi de Francia. La victoria del Frente Popular en las elecciones esconde una lucha interna entre los diferentes frentes dentro del partido que conducen a un argumento muy pesado para los no iniciados en dicho contexto histórico (como prueba de ello he oído roncar a un asiduo espectador).Es tal el lío que el protagonista no solo es espía o agente doble si no que triple, hay momentos en los que no sabes como lo hace, y pensar que está basado en hechos reales, menuda vida qué capacidad para mentir.

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