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martes, agosto 02, 2005 

Choques y libros

Tras una mañana dedicada a recopilar la lista de los libros que me quiero comprar en la feria, esta tarde he ido en coche a la playa de As Lapas. Al salir del garaje tuve mi primer rayazo con otro que estaba aparcado por culpa de uno que venía de frente y me dejó poco sitio para pasar, por un lado calculé mal pero el otro tendría que haberse movido algo. Pensé que sólo le había tocado con el espejo pero cuando aparqué en la playa comprobé el estado de mi lateral y comprendí que había huido como un vulgar delincuente sintiéndome culpable por irme tras haber rozado un coche que no tenía la culpa. Estaba tostándome cuando llegó Álvaro con Raquel que ya no soportaba estar en Sarria y venía a Coruña para visitar a su amado y pálido novio. Amena conversación, baño incluido y vuelta a casa dejándoles esperando por Tamara, amiga de Raquel que vive en Santa Cruz y que iba a alojar a Raquel por unos días. Aproveché el resto de la tarde para ir a la feria del libro, sólo porque Tóni no podía y Marta tampoco. Me compré tres libros; dos novelas largas, “2666” de Bolaño y “La Vida: Instrucciones de Uso” de Georges Perec que había comenzado en su día pero que el corto tiempo de préstamo de las bibliotecas me había impedido terminar; y un libro de poesía que llevaba mucho tiempo buscando “El Libro de Urizen” de William Blake. Durante dicho proceso me encontré con Javi, segundo ex de Marta que veo en menos de una semana (¿será una señal?), me cuenta que sigue de baja por sus problemas intestinales pero que le va bien y me presenta a su novia mientras comentamos lo ilusionados que estamos con el nuevo Depor de Caparrós. En el portal de casa me encuentro con Ana, la madre de Santos y Carolo, que me cuenta las últimas novedades de sus hijos y su estado de ánimo. Le recordé que si necesitaba ayuda que me llamara y regresé a casa.

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