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domingo, marzo 06, 2005 

Reencuentros y sorpresas

Tras una mitad de semana sin vida social, aislado por la certeza de la finalización del contrato y la incertidumbre de una renovación de las prácticas o una nueva negociación, el jueves comenzó el periplo por las salas de cine. Ante la posibilidad de quedarme sin entradas para las películas del Forum decidí cogerlas anticipadas con lo cual me aseguraba la presencia y rechazaba cualquier cita o cambio de planes de última hora. Sin embargo, el Jueves había menos gente de la esperada para ver Nine Songs de Michael Winterbottom, aunque no por ello fuera mucha gente conocida: habituales del CGAI, Lens y compañía, o Lucía que se sentó a mi lado. Una vez más, Michael Winterbottom aborda una nueva forma de presentar las relaciones de pareja centrándose en la intimidad sexual, en lo que suele quedar entre el fundido en negro de los preeliminares y los minutos posteriores de vuelta a la vida cotidiana, sin ningún tipo de censura consiguiendo una interacción de la pareja protagonista muy verosímil. La parte musical también consigue colocarnos en primera fila de los fabulosos conciertos, la envidia te corroe como espectador al ver a tanta gente disfrutando en lugares incomparables. Los guiños musicales a sus seguidores se hacen palpables al utilizar a Michael Nyman interpretando temas de la maravillosa banda sonora de Wonderland. Salí de la sala contento y esperando a Lucía para comentar la peli y de paso, tomar algo pero una vez más nuestros caminos eran distintos.
Al dia siguiente volví al Forum a ver Super Size Me de Morgan Spurlock. Esta vez coincidí con Juanjo el Dj del Patachim, tras una breve charla acerca del nuevo horario de cierre de los pubs y de la movida Pulso, vimos el documental sorprendentemente rodeados de madres concienciadas que arrastraban a sus hijos hacia la verdad sobre Mc Donals. La verdad es que ya sabia bastante sobre el tema como para que me contaran algo nuevo, pero me gustó el proceso llevado a cabo por el director, aunque el afán de protagonismo es una moda de los documentales bastante criticable. Además estoy seguro que si vas a desayunar, comer y cenar durante un mes al Gasthof o Sousantos por ejemplo, seguro que también engordas aunque no tanto. Siempre he sido anti macdonal incluso estuve en una concentración enfrente al de Coruña donde nos hicieron fotos los empleados. Solo tomé algo tres o cuatro veces en un McDonal :una en BCN hace casi diez años porque el resto de la gente queria ir, otra en Madrid por un capricho de Carol hace dos años y varias veces en Coruña a tomar esos helados baratos con Santos y Alvaro. Las veces que acompañé a alguien (mi hermano Juan o a David y Maria nunca comí nada).Después de la peli me fui para casa (otro viernes sin salir).
El Sábado fue uno de esos dias en que te suceden cosas que no esperas. Fui a comer a casa de mi tio con mi padre. Como tenía la tarde bastante libre me iba a quedar más tiempo hablando con mis primas y ojeando revistas tipo Elle, Woman para ponerme al dia de las tendencias femeninas, pero otro de mis tios se iba y como lo veo poco decidí bajar con él y charlar por el camino. En eso estabamos cuando el azar en forma de coche se cruzó conmigo, era Juan Llamas, no lo reconocí y seguí mi camino. Me despedí de mi tio y decidí pasarme por el Adidas Center porque me había parecido ver, al pasar unos minutos antes, unas míticas camisetas retro del Mundial 82, concretamente la de CCCP. Y el azar quiso que Juan Llamas se volviera a cruzar conmigo esta vez de peatón. Como se está cambiando de casa, mejor dicho independizándose, le acompañé al Baul De La Abuela y a Zara Homme a comprar cosas para su piso. Yo que soy un inculto en estos temas de sábanas, manteles y similares me quedé alucinado con la gama de colores y tejidos disponible. Pero lo que más me impactó fue el reencuentro con el pasado, los años del instituto volvieron a mi mente al ver en Zara Homme a Esther uno de mis amores imposibles tirando de un carrito de un bebé, seguía estando muy guapa y lo más patético es que no nos saludamos y me quedé con las ganas de ver si el niño se parecía a mí por si estaba delante de mi otra vida en un universo paralelo…además estaba de dependienta Montse, otra antigua amiga del instituto que se suponía que estaba preparando oposiciones y ella sí que me saludo y sonrió. Tras este paréntesis nostálgico ocurrido mientras Juan pagaba, aunque a mí me pareció una eternidad, nos fuimos hasta su nuevo piso para que me lo enseñara, viene a vivir al barrio y al lado del Polvorín. Después me acercó al CGAI donde ví Les Enfants Du Paradis de Marcel Carné, casualmente película sobre reencuentros y amores imposibles, con la actriz gallega Maria Casares en plan estelar. Salí del cine con el tiempo justo de tomarme un sándwich vegetal en el Hut y dirigirme al Playa al Soft Pop Tour 05.Se podría decir que fue la edición más floja de todas, la presencia de Nacho Vegas fue lo único que consiguió arrastrar a gente a ir.Empezó Darren Hayman (ex-Hefner) muy valiente (no hay muchos que se atrevan a comenzar tocando con un oukelele o como se diga esa especie de miniguitarra), estuvo divertido y me sorprendió mucho. Ante mi sorpresa el segundo fue Nacho Vegas, que estuvo más centrado y menos colocado que cuando actuó en solitario en otra ocasión.Cerraron el minifestival The Zephyrs que no tenían grandes admiradores y cumplieron el expediente con creces.Una vez más tuvimos que soportar a los que van a molestar a los conciertos, deben entrar gratis si no definitivamente son gilipollas pagar por algo que no te gusta no es normal.Estuve con Javi, Miri y el "quinto miembro"(nunca me acuerdo de su nombre) de los Nouvelle Cuisine, al acabar cogimos un taxi y nos fuimos al Pata, también hablé con Sole de la panda de las hermanas Cuba.El listo que se le ocurrió poner el horario de cierre de invierno en pleno mes de Marzo a las 3:30 para que descanse la gente, nos hizo irnos al Mardigras. Allí tras media hora de baile y calor los Nouvelle Cuisine se fueron y me encontré con Bea que estaba con Vanessa la hermana de Juanjo y con Natalia la camarera del Polvorín y dos tíos más.Me uní al grupo salvo un breve lapso de tiempo que fui a un nuevo reencuentro esta vez con compañeros del colegio, Manolo que venía de visita desde Mallorca y Rafa, uno de los pocos que sigue por aquí como yo.De vuelta al grupo de Bea estuvimos viendo al personal y poniéndonos al dia hasta que cerraron.En la salida tuvimos la típica conversación sin sentido para decidir que hacíamos, el resultado como suele ser en estos casos fue todos para casa, casi vamos al Playa pero fue tal paranoia que lo mejor era dejarlo ahí.
El Domingo quedé por la tarde en el Hispano con Toni, Sergio y Tonecho.Se produjo el último reencuentro del finde, una chica que fue conmigo a Zalaeta que siempre tuvo su morbillo pero que nunca supe nada de ella ni su nombre, trabaja algún Domingo allí.También pasamos por el Macondo desde donde me fuí al fútbol con Tonecho (el depor volvió a ganar en casa).

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