Estoy en el CGAI

Decir adios al Carnaval no significa entrar en una época de recogimiento y dejar de divertirse, al contrario a mi nadie me tiene que decir cuándo debo divertirme y por qué.Después de esta sesuda reflexión bajo los efectos del miércoles de ceniza no festivo y del sueño acumulado por culpa de la puta orquesta de la calle de La Torre con sus patéticos hits comerciales hasta la una, paso a comentar a mis queridos drugos los dos últimos días de carnaval.El Lunes, quedé con Carolo en el Soho a las 12:30.Mientras esperábamos a Iván y Mónica, entró Javi Doc con un amigo (no me acuerdo de su nombre aunque la verdad es que ni hablamos), se unieron a nosotros y unos copazos después(ya con Iván & company) nos separamos.Fuimos al Pata, intenté aguantar pero cuando pusieron a Battiato tocaba tarimear (Iván dixit), por un momento se unió Patricia pero cuando pusieron a Astrud se bajó (tomar nota:no le gusta Astrud).Desde las alturas pude observar disfraces varios, los mejores los de las hermanas Cuba vestidas de cinquième elemment (Milla Jovovich para los no iniciados), estuve tentado de quitarme la camisa y quedarme en camiseta blanca de tirantes para parecerme a Bruce Willis pero tendría que tener menos pelo (tiempo al tiempo) y quitarme las gafas, no vería nada y me caería ante el regocijo general.Cumplido el trámite habitual patachinero bajamos hasta el Velvet donde pinchaba Diego D.(a mi se me parece a Vincent Gallo pero nadie comprende mis parecidos razonables...algún día hablaré de ellos).También aquí tocó tarima, acompañado esta vez por Mónica, parecía algo cortada al principio pero después no dejó de bailar.Hubo un momento que puse demasiado ímpetu salté y me corté en el menique con un foco, no paré de sangrar y como picaba el cabrón.Como es habitual Iván aprovechó para hacer fotos aunque no con su mega-cámara-negra-que-te-deja-ciego y espero que cuelgue alguna.Tras un fin de sesión brutal, crazy in love, llenos de sudor salimos a la rue.The couple se marchaban a casa, Carolo y yo dudando entre ir al Playa o no, finalmente el frío nos convenció y pasamos de ir.
El Mardi Gras lo pasé vejetando hasta las 8 que cogí una arrugada y despeinada peluca rubia y un abrigo antiguo muy hortera del fondo del fondo del fondo del armario(al lado del jersei de rombos) y me fui en plan choqueiro a la cita anual con la calle de la Torre.Pensando en la people del barrio que podría estar por allí llamé a Marta que estaba con Su, Luz, Marcos y mucha peña desconocida, nos encontramos por la zona y me quedé con ellos hasta que la peluca y el polvo del abrigo se hicieron insoportables para mi olvidada alergia y me fui para casa.