« Home | Moulin Rouge » | Batalla en el cielo » | Manuale D’Amore » | Mi futura cuñada » | Il Posto » | Primer año y nueva cara » | Guardar plantilla » | Adiós cena ligera » | Los Caníbales » | Hermanos » 

viernes, enero 27, 2006 

Antes del Atardecer

La segunda sesión con apenas media hora de descanso, aprovechada para un rápido capuchino, incluía una presentación previa y un coloquio posterior con el crítico Carlos Losilla. Uno de los móviles de Marta sonó y a punto estuvo de no venir a la siguiente película, que fuera gratuita inclinó la balanza aunque no se quedó al coloquio final.
Aunque me había comprado en mi última visita a Barcelona el pack de las dos películas de Richard Linklater y había visto en su día en el cine “Antes del Amanecer” y me había encantado, no estaba preparado hasta ahora, para dar ese salto en el tiempo y ver “Antes del Atardecer”.
Por aquella época todos soñábamos con hacer el ínter raíl y conocer a alguien especial, esa historia nos permitió seguir soñando. Además nuestra edad era un par de años menor que la edad de los personajes por lo que nos gustaba aún más dicha posibilidad.
Quise tener fresca en la memoria la primera parte y la he visto esta semana. Ya estaba preparado para asumir ese paso del tiempo.
La película transcurre en tiempo real y tanto Jesse como Celine conservan esa conexión que les hizo acercarse hace nueve años. La cita fallida deja paso a los reproches y al análisis de cómo influyó en sus vidas posteriores, pero seguimos contentos de verlos juntos de nuevo en otra ciudad y con otra edad. Estamos paseando a su lado sin que nos vean. Podrían saltar las lágrimas en cualquier momento pero nos mantenemos firmes y seguimos su evolución. No dudan en mezclar realidad y ficción, por momentos no vemos a los personajes caminar si no a los actores. El final se acerca, presentimos lo que pasará pero no de qué forma, nos lo muestra tan bello, tan propicio al debate posterior que nos deja una sonrisa en los labios.
Se encienden las luces y se marchan menos de los que pensábamos, esta vez no será un debate a cinco, somos casi una veintena. El final es lo que suscita más comentarios y pasamos otro rato muy agradable.
Al salir podría llegar a tiempo al concierto de Clovis pero mi cuerpo me pide otra cosa: volver a casa, hacerme un té y descargarme, de una vez, el disco de Julie Delpy y alguno más de Nina Simone.

Powered by Blogger
and Blogger Templates